Los diarios normalmente son secretos, pero el mio no es un diario normal. Es todo vuestro.

martes, 24 de agosto de 2010

Daniel e Irene


-Irene se asomó por la ventana como si le fuera la vida en ello, y me hizo señales con las manos de que me esperase y no dijera nada si alguien contestaba al portero automático. Me aparté unos centímetros del portal y de pronto sonó una grave y profunda voz "¿Quién es? ¿Qué coño quieres a estas horas? ¿Oiga?". Mi corazón estaba tan encogido que apenas le bombeaba sangre a mi cerebro y entré en un estado como sumergido, en un mundo paralelo sin escapatoria. Irene se volvió a asomar por la ventana y me hizo un gesto invitándome a entrar a su casa. Unos segundos después, la puerta se abrió, corrí por las escaleras hasta plantarme delante de su puerta.

-No me lo podía creer, se había atrevido a llamar. Y creo que no, no era capaz de dejarle allí abajo. Salí al balcón corriendo y después de decirle que no dijera ni una palabra al portero automático, le abrí la puerta. Y allí estaba, plantado delante de mí, calado hasta los huesos. Calado de amor. Mis padres estaban en una habitación en el piso de arriba y creo que no se daría cuenta de nada. O eso esperaba. Le invité a pasar a mi habitación y tan solo le dije una cosa. "Te echaba de menos". Me acerqué a él, y le besé en los labios. Le tenía tantas ganas...

-Apreté su cintura contra la mía, ella estaba temblando, quizás sería del frío que desprendían mis prendas mojadas, quizás estuviera nerviosa porque sus padres podían bajar en cualquier momento y ver que un " desconocido " andaba en la habitación de su hija a las tantas de la madrugada, quizás era la impresión del momento... Acaricié su bello rostro, un rostro gélido y suave, tan suave que ensumió los poros de mi piel en un verdadero sueño. "Siento haberme presentado a estas horas..., no podía esperar más, tenía que verte, necesitaba verte. Lo siento." Me besó en los labios, me volvió a besar, me besó y le besé, de repente separó los labios de los míos, y su mirada se perdió en mi camiseta, algo estaba pensando pero, ¿el qué?

-Y es que quería que el tiempo se parase. Quería no pensar en aquello. Me miraba con esos ojos marrones tan bonitos que él tiene, y me preguntaba con la mirada qué era lo que pasaba. Y yo simplemente le sonreí, le sonreí como tonta y volví a acercarme a él. Le abracé y pensé mil veces si decírselo o no. No, no podría contárselo, ahora no, sería demasiado triste y esta noche quería que fuera nuestra. Así que le acaricié las mejillas y volví a besarle. Algún día tendría que contarle que en 2 meses me mudaba a otra ciudad, pero hoy no sería ese día.

-Sabía que algo le preocupaba, conocía esa mirada de complicidad pero a la vez de tristeza, no se porqué actué como actué, porque siempre que se ponía así hablábamos de lo que ocurría, pero esta vez no, esta vez necesitaba sentirle, y necesitaba demostrarle el porqué estaba a esas horas de la madrugada plantado allí en su habitación. Desabrochó los botones de mi camisa, una camisa blanca, pero que ahora era más bien color carne, ya que empapada se agazapaba contra mi torso y la volvía practicamente transparente. Me quitó la camisa, y en ese momento empezaron a brotar a borbotones gotas de sudor desde mi frente y mis hombros, estaba nervioso, nunca me había pasado algo así con ella, ni con ella ni con ninguna persona. Era normal pensé, pero eso hacía que me pusiera más nervioso aún. Ella notó que estaba algo inquieto, se acercó y me susurró al oído "tranquilo".

-Le notaba nervioso, era la primera vez que hacíamos algo así y él estaba muy nervioso, pero creo que no tanto como yo. Me temblaban las manos y tardé una eternidad en desabrocharle los botones de la camisa. No se exactamente por qué, le dije que se tranquilizase, cuándo en realidad la que tenía miedo era yo. ¿Y si no estaba totalmente preparada? ¿y si no le gustaba? ¿y si no me quería lo suficiente?. Llevo demasiado tiempo pensando en esas preguntas, y llegado el momento, lo único que hice fue dejar la mente en blanco y pensar en él. Él y su sonrisa perfecta, él y sus ojos marrones, él y su pecho perfecto, él y sus palabras, sus susurros, sus te quieros. Había pasado mucho tiempo desde la primera vez que nos vimos. Y en todo ese tiempo lo único que yo había echo era quererle, quererle mucho. Así que estaba más que preparada.
Comencé a acariciarle y a besarle. Le dije al odio que le quería, una vez más. Y le quité la camisa.

13 comentarios:

  1. solo una palabra: Woow! :$

    ResponderEliminar
  2. Es precioso!! :)
    me ha gustado mucho .

    ResponderEliminar
  3. Dioss es tremendamente increibleee -*.*- Me encantaaa!!

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado esa forma de escribirlo, dando a conocer los pensamientos intercalados de cada uno... Consigues sumergir inevitablemente al lector tan solo al empezarlo.
    Realmente precioso.

    Un beso enorme! (:

    ResponderEliminar
  5. Dois me ha encantado.
    Te sigo :)

    Pasate por mi blog.
    Un besito♥

    http://goldenssmiles.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  6. Me gusta mucho tu blog! :D
    Pasate por el mio :D
    Un besoo!
    http://violetta-violeta.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  7. El texto es precioso, lástima que haya gente que se dedica a copiar y pegar, y ponerlo en su blog.
    Sin darse cuenta que lo has escrito tú, y en fín..

    Es precioso, sin lugar a dudas :)

    Un beso, pásate por el mío ^^

    ResponderEliminar
  8. Es un texto precioso! :)
    Me encanta!
    Es una pena que ciertas personas se dediquen a tirar por la borda el esfuerzo simplemente para conseguir que alguien piense que escriben bien!
    Te sigo :)
    Me encanta como escribes! :D Sigue asi

    ResponderEliminar
  9. ojazos preciosoo! :)
    Como se atreven a plajiar? q sepas q x mucho q t plajien sigues siendo unanica.un besazo enorme.♥♥
    By: LCDLS

    ResponderEliminar
  10. Me encantaaaa!
    Espero que te pases ;)
    http://habitacioninventada.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  11. Hola

    Me llamo Romina, soy administradora de un directorio web/blog. Tengo que decir que me ha gustado su página y le felicito por hacer un buen trabajo. Por ello, me encantaría contar con tu sitio en mi directorio, consiguiendo que mis visitantes entren también en su web.

    Si estás de acuerdo. Házmelo saber.

    Suerte con tu web!
    rominadiazs@hotmail.com

    ResponderEliminar